martes, mayo 06, 2008


Uf...el tiempo pasa algo rápido y ya es mayo de 2008 y Zacatecas tiene ganas de alzarse en los hombros de esta bruma primaveral y hace tanto que no se publica nada en este blog...ya no prometo, pues en el prometer no está el dar, así que por ahora entrego un poema, y ya no digo más.

NO ES
para José F.A. Oliver

Pasan los años y el lacónico me gana. Lacaniano, lacónico,
platoniano hecho de plata. Me descubro entonces
menos lejos de mí,
pero a la grave distancia entre el asceta y el arco.

Donde quisiera estar no sé si estoy:
en el centro del devenir se desparrama el pasado.
No imagino a donde y cómo voy,
hay humus de Lisboa sobre mi piel decantado.

Mas no es el Tajo el que inunda mi vacío,
-producto matutino, seca hechura-: es el desierto
y su amenaza de libélula, su brama reposada y
sus cadenas en mi verso.

A orillas del corazón está la espuma más espesa.
Y no se ascienden escaleras ahí,
sólo hay que detenerse en un peldaño:
mirarnos subir nuestro camino hacia abajo.

Eso no es melancolía.

4 comentarios:

Sergio J. Monreal dijo...

Daniel:

Hace tiempo, un funcionario de la Secretaría de Cultura de Michoacán me entregó un volumen de poemas suyos, que al parecer usted personalmente me enviaba.

A lo mejor la situación de la entrega fue diferente y la memoria me traiciona un poco. Lo cierto es que leí y tengo el libro, que es usted el único poeta potosino que aparece en mi escasísimo y suigeneris horizonte de relaciones social-literarias, y que el próximo viernes 6 de junio yo tengo que presentar un libro de poemas míos en San Luis.

Por su blog, infiero ya no radica usted allá, pero su aliento y mirada poética me estimulan la confianza para preguntarle si no sabría usted de alguien que pudiera interesarse en compartir escena en la casa de López Velarde con un hacedor de versos michoacano. Mi única alternativa hasta ahora es una quincuagenaria ultrafeminista con la que ni generacional ni lìricamente tengo demasiado que ver.

Espero que mi memoria no sea tan mala como para que me esté inventando de pe a pa una historia que jamás sucedió, de modo que no tenga usted la menor idea de quien es el tipo que le está escribirndo. Si tal fuera el caso, disculpado el desliz, le haré llegar algún material textos para que vea (espero) que no hará pasar ningún papelón a un amigo por proponerle presentar textos míos.
O al contrario, para que los ponga sobreaviso y ninguno vaya a dar el mal paso si al final es la propia gente de la casa quien tiene que buscar a alguien.

Mis correos son sjumov@gmail.com y sjumov@yahoo.com.mx

Saludos. Y Gracias de antemano.
Desde Morelia
Sergio J. Monreal

Gerardo Cruz-Grunerth dijo...

Vías circulares
Mientras tanto, seguías metiendo la cabeza en el suelo, buscando la raíz de la lengua que te hablaba; el único hallazgo fue un reflejo de plata junto a las cegatonas lombrices, lo justo para el viaje en metro.
Salías con la cabeza sucia de tierra húmeda para respirar; sólo sentías el viento que siempre traicionaba tus deseos, ahí no estaba. Seguirías en las búsqueda.
En la vía cavada a tres metros bajo la noche, cuando hacías una pausa para el descanso los dedos sangrados por la labor, leíste con ojos de tierra el mensaje que habías dejado jornadas atrás: "Letras negras rotas. Ariadna está muerta. No me sigas, estoy perdido". En la superficie el viento soplaba cuando emergiste a respirar.
Mr. Lluvia Oblicua

Alfredo Carrera dijo...

Ese funcionario fui yo, que no he sido funcionario, cuando veniste a presentar el libro platicabamos sobre a quién entregar dos o tres ejemplares que me dejabas. Ay disculpará mi premura en el correo-e pero realmente me soprendí.


Más saludos Daniel, ojalá la comunicación se restablezca.
acl

Letisha Carlop dijo...

Sólo pase a saludarlo, desde las piedras rosas...